El escritor italiano será una de las figuras a seguir en la FIL
El italiano estará en Guadalajara en la inauguración de la FIL.
Claudio Magris (Trieste, 1939) afirma que es uno de los pocos autores que todavía escriben a mano. “Hacer eso representa para mí como escuchar la música de la escritura”, asegura el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances.
El escritor, traductor, profesor en la Universidad de Triste y Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 2004, estará en Guadalajara para recibir el reconocimiento durante la apertura de la Feria del Libro de Guadalajara que arranca el 29 de noviembre.
Su presencia en la ciudad será una excelente oportunidad para conocer su obra, que oscila entre la narración, el ensayo y los libros de viaje.
Candidato en los últmos años al Premio Nobel de Literatura, asegura que los escritores deben tener un compromiso social y político, como cualquier persona común. “Un escritor no sabe más que cualquier otro hombre. Todos debemos empeñarnos en combatir el hambre, la pobreza, el mal. Todos debemos sentirnos parte de la raza humana”.
Trieste ha sido para Magris, como el Comalá de Juan Rulfo o Macondo para Gabriel García Márquez, uno de sus principales fuentes de inspiración y terreno literario.
El autor de Conjeturas sobre un sable, El Danubio, Otro mary Microcosmos, aseguró durante el anuncio del premio que este galardón era una gran sorpresa y reconoció que ha leído a Carlos Fuentes, Fernando del Paso y Juan Rulfo “quien continúa cimbrándome con Pedro Páramo. La lengua española siempre ha recibido de maravilla mi obra y eso me hace doblemente feliz“.
El jurado del premio destacó que Magris representa “la mejor tradición humanista” y que su obtra “concilia su experiencia personal con la memoria colectiva de la historia”.
“Su escritura, erudita y poética, imbrica la reflexión rigurosa sobre la literatura, la historia, las artes y las culturas con la narrativa autobiográfica y de ficción”, se afirma en el acta del jurado.
Crítico de la situación en Europa y de la crisis que azota a Italia, aseguró a una entrevista a El País en 2012 que no es pesimista respecto al futuro, ni nostálgico del pasado. “Estoy contento de vivir ahora. Es evidente que la literatura no es una crónica, pero debe contar los tiempos tristes que estamos pasando, ha de reflejar nuestras preocupaciones. Pero a largo plazo yo no me siento pesimista".
