“Hasta el momento han intervenido dos espacios públicos en los fraccionamientos Residencial La Mesa y La Azucena”
Iniciativa Ciudadana: Hace un par de años nació REVES, un grupo de jóvenes que rehabilita espacios verdes en el municipio de El Salto.
El Salto es uno de los municipios con mayores rezagos e índices de pobreza del Área Metropolitana de Guadalajara. Según datos del Consejo Estatal de Población el 43.8% de los habitantes (53 mil 760 personas) viven en pobreza y 27.4% (33 mil 640) es vulnerable por carencias sociales.
El Salto tiene además un grave déficit de espacios públicos de calidad y forma parte del Polígono de Fragilidad Ambiental de la Cuenca de El Ahogado y El Salto, el cual fue establecido tras la macrorrecomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco, a raíz de la muerte del niño Miguel Ángel López luego de caer al Río Santiago en 2008.
Frente a esta realidad, en 2012 nació el grupo REVES (Rehabilitación de Espacios Verdes de El Salto), un proyecto cien por ciento ciudadano que se dedica a rehabilitar y acondicionar espacios verdes que antes estaban abandonados.
La primera intervención que realizó este grupo de jóvenes fue el año pasado en Residencial La Mesa, un fraccionamiento ubicado a ocho calles del centro de la cabecera municipal. Ahí, nivelaron y limpiaron el terreno de cinco mil metros cuadrados. Luego, plantaron más de 150 árboles donados por un vivero comunitario de la Asociación Civil “Un Salto de Vida” y consiguieron que una empresa, ZF Suspensión Technology, les regalara media tonelada de tubería que fue transformada en dos porterías para una cancha de futbol.
“Hemos hecho un ejercicio muy interesante de participación ciudadana. Todo lo que hacemos es a través de donaciones que conseguimos, con ayuda de los vecinos, regalos en especie y con dinero que ponemos los miembros de nuestro propio bolsillo”, afirma Francisco Flores, secretario del grupo.
Las obras en este parque no concluyen ahí. En los próximos meses construirán varios andadores peatonales y, si consiguen los recursos suficientes, terminarán un área infantil y colocarán dos capillas: una dedicada San Cristóbal y otra a la Virgen de Guadalupe.
“Le vamos a echar muchas ganas, en este momento las obras van al 50%”, agrega Francisco.
El principal impulsor de esta iniciativa se llama Ricardo Camacho Beltrán, presidente de REVES. Tiene 32 años y muchas ganas de dejar un entorno mejor para mis hijos. “Deseo tambien una ciudad más justa para todos en donde ricos y pobres tengamos las mismas oportunidades de vivir una vida plena, me siento afortunado de vivir en El Salto y poder luchar todos los días por un mejor lugar con gente que no cobra ningún sueldo y lo hace por amor al planeta”, afirma.
Ricardo asegura que ya han comenzado a hacer un proyecto similar en el fraccionamiento La Azucena, dentro de un área de 600 metros cuadrados.
“Les presentamos un par de propuestas a los vecinos y hablamos con ellos para saber qué tipo de parque querían. Ellos mismos votaron y quedó el proyecto de un parque que tendrá la forma de un reloj de arena, con área para juegos infantiles, árboles, un foro público y andadores peatonales. Es muy importante que en una zona como El Salto se generen estos espacios porque funcionan como microclimas y ayudan a combatir la contaminación generada por el corredor industrial”, asegura Francisco.
En este lugar ya han plantado 50 árboles y han hecho eventos públicos con música, cine al aire libre y funciones de circo, para dar a conocer las obras.
“La relación con los vecinos ha sido muy positiva. Creemos que ellos son parte fundamental de este proyecto porque finalmente son los encargados de cuidar este lugar. Para eso precisamente se hacen este tipo de eventos, para socializar el parque, para que se integren y se sientan dueños de él”, dice Francisco.