La periodista Yolanda Zamora tiene más de tres décadas acompañando con su programa de radio las mañanas de los jaliscienses.
“Su programa ha perdurado no sin sortear varias dificultades”
Yolanda Zamora (Mazatlán Sinaloa, 1949) acaba de cumplir 30 años en la radio pública con su programa A las nueve con usted, un espacio de difusión cultural donde expertos y colaboradores de los diversos ámbitos del saber y del mundo de la cultura, el cine, la literatura, la música o la filosofía, se sientan a hablar.
El programa se transmite de lunes a viernes en el Sistema Jalisciense de Radio y Televisión porque, afirma la periodista, está convencida de que “la cultura hay que tenerla todos los días, no debe ser una opción sólo de fin de semana, sino que tiene que estar presente siempre”.
El programa ha perdurado no sin sortear varias dificultades, como la censura que tuvo por parte del gobierno durante las explosiones del 22 de abril o la más reciente, cuando la obligaron a cambiar su tradicional horario de las nueve de la mañana (después de 29 años) a las ocho. Este cambio supuso la transformación de un programa solamente de radio en un producto híbrido de radio televisada.
Para Zamora, quien en su juventud practicó la danza, la motivación de hacer este programa sigue intacta. “Porque parte del absoluto convencimiento de que el programa tiene un sentido auténtico que incide en cada uno de los radioescuchas, abriéndoles posibilidades de realización en su propia vida a través del encuentro con el arte y la cultura”.
Zamora concibe el oficio del periodista como una vocación de servicio a los demás. “En mi familia se privilegió mucho la cultura y eso es algo que me gustaría que le pasara a muchas personas”.
Por el programa han pasado aproximadamente 250 colaboradores, entre los que destacan personajes tan importantes como Guillermo del Toro, Juan Rulfo, Juan José Arreola, además de cientos de expertos que han formado parte de la historia cultural de la ciudad en los últimos 30 años.
“El programa es un proyecto colectivo. Para mí son igual de emotivas las entrevistas con un intelectual que con el ‘panadero de la esquina’ por ejemplo”. Respecto a la diferencia entre entrevistar a alguien con estudios académicos y a alguien que no, la periodista remarca que “el artista o el intelectual reflexiona más las preguntas, sin embargo la gente del pueblo está menos preocupada por la trascendencia de sus respuestas”.